Montar en bicicleta es uno de los mejores ejercicios aeróbicos que pueda haber; barato, divertido y, además, es ideal para compartir buenos momentos con tu familia y/o amigos, incluso en solitario; estés en la ciudad, la playa, el campo o cualquier otro sitio.
Es sin duda el medio de transporte más ecológico y sostenible, ya que no emite gases responsables del efecto invernadero.
Cada vez más ciudades en todo el mundo se deciden a apostar fuerte por el uso de las dos ruedas, fomentando la bicicleta como transporte accesible de forma pública; así como los carriles dedicados exclusivamente a tal fin.
¿Y por qué es tan buena la bicicleta? Te indicamos algunos de los beneficios que supone para nuestro cuerpo usar la bicicleta antes que cualquier otro método de transporte.
Usar la bicicleta nos aporta beneficios a cada minuto
Aunque lo ideal es pedalear entre 45 y 60 minutos, a los pocos minutos de empezar a hacerlo ya podemos ver sus resultados.
- A los 20 minutos de estar pedaleando, estamos reforzando nuestro sistema inmunitario.
- A los 30 minutos, reforzamos nuestro sistema cardiovascular.
- A los 40 minutos, nuestra capacidad respiratoria se ve aumentada.
- A los 50 minutos, el metabolismo se acelera.
- A los 60 minutos, nuestro cuerpo alcanza un bienestar general.
El riesgo de infarto se reduce en un 50%
Al tener los pies en continuo movimiento, el ritmo cardiaco aumenta y la presión arterial se reduce, lo que hace al corazón trabajar de una forma mucho más eficiente; por lo que pedalear es un buen ejercicio cardiovascular.
Un ciudadano holandés recorre, de media cada año, unos mil kilómetros en bicicleta.
Reduce el colesterol
El colesterol malo, el «LDL», se ve reducido, a la vez que aumentan los niveles del colesterol bueno. Con esto, se ve beneficiado el funcionamiento de los vasos sanguíneos, y habrán menos probabilidades de que se calcifiquen.
Aporta felicidad
Mientras estamos pedaleando, estamos generando endorfinas, las llamadas «hormonas de la felicidad».
Nos protegemos contra las infecciones
Al estar potenciando continuamente el sistema inmunológico mientras pedaleamos, el riesgo de contraer cualquier tipo de infección, incluido el cáncer, se ve disminuido.
Fortalecemos las articulaciones
Al contrario de lo que piensa mucha gente, el hecho de montar en bicicleta ayuda a reforzar el funcionamiento de las rodillas. No debemos olvidar que casi un 80% del peso corporal es apoyado sobre el asiento, reduciendo el impacto; cosa que no ocurre, por ejemplo, corriendo o saltando.
Un buen ejercicio para todo el cuerpo
No sólo estás moviendo las piernas, sino que además mientras estás pedaleando estás trabajando físicamente la mitad superior del cuerpo, mientras controlas el equilibrio y el balance.
Moverte siempre en bicicleta te va a ahorrar muchas visitas a la consulta del médico. Es una forma ecológica además de sana de desplazarse haciendo a la vez ejercicio.
Por todos estos motivos, ya la uses por divertirte, por hacer ejercicio o simplemente por comodidad, la bicicleta siempre es beneficiosa para tu cuerpo.